jueves, 20 de diciembre de 2012

Eres tú


Es sudor, son lágrimas, es saliva y gemidos, es un bostezo en tu hombro, un viernes por la noche, es el beso de buenas noches y el de buenos días. Son pellizcos, son cosquillas, es hacerte el amor lentamente, es hacértelo de forma salvaje, es orgía, es un brillo nuevo en la mirada, es dolor, es risa descontrolada, es hacer el ridículo, es recordar cada gesto de tu rostro, es el pequeño lunar junto a tus labios, es libertad, es vida, es una lágrima salada, es un lloro ardiente surcador de ríos en mi rostro, es mi mechón desprendiéndose y tu mano colocándolo detrás de la oreja, son celos y ese palpitar enloquecido del corazón, es un orgasmo y todos los que vendrán después, es eterno y es efímero, es todo y la cosa más nimia, es frustrante, es luz y camino, es una noche estrellada, es cada roce, cada mes, cada caricia.. Es un tú y yo movidos por este amor que no tiene límites…


El valor de la tinta


Las palabras me devolverán aquello que mi mente olvidó. Pues entre el ser y la tinta, siempre prevalece la tinta. Aun cuando el cuerpo queda reducido a polvo, mis palabras permanecerán intocables en mis cuadernos.


domingo, 2 de diciembre de 2012

La muerte es salada


Empecé a sangrar y vi brotar de mi cuerpo torrentes de maldad. La energía negativa escapaba de mí al igual que tiempo atrás todos lo habían hecho.
Muerte, eres salada como un naufragio.
Aunque cálida y deseada para algunos, te conviertes siempre en algo agonizante al percibir tu garra sacudiéndote como una marioneta cogida directamente del corazón sangrante.
Cuando mueres no lloras, no ríes, sólo esperas… volver atrás, decir adiós…
Cuando mueres no hay luz, no hay oscuridad. Sólo soledad y certeza de que no volverás a tener miedo. Cuando mueres no hay nada, por que la muerte no es hola ni es adiós. Porque la muerte es el comienzo de la nada.